Infraestructura

HOSTING

Imagina tu sitio web como una casa y el alojamiento web como el terreno donde se encuentra esa casa. Cuando creas un sitio web, necesitas un lugar para almacenar todos sus archivos, como HTML, imágenes, videos y otros contenidos. El alojamiento web te proporciona ese espacio.

Cuando alguien quiere visitar tu sitio web, escribe la dirección de tu sitio web (nombre de dominio) en su navegador web. El navegador se conecta al servidor de alojamiento web donde se guardan los archivos de tu sitio web. El servidor recupera los archivos y los envía de vuelta al navegador del visitante, que muestra tu sitio web en su pantalla.

Las compañías de alojamiento web tienen computadoras potentes llamadas servidores que están conectadas a Internet las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Estos servidores almacenan los archivos de tu sitio web y los hacen accesibles para cualquier persona que quiera visitar tu sitio.

Diferentes planes de alojamiento web ofrecen diferentes cantidades de espacio de almacenamiento, ancho de banda (la cantidad de datos que se pueden transferir) y otras características para adaptarse a las necesidades de diferentes sitios web. Algunos planes de alojamiento son compartidos, lo que significa que compartes los recursos del servidor con otros sitios web, mientras que otros ofrecen recursos dedicados exclusivamente para tu sitio web.

En resumen, el alojamiento web es como alquilar un terreno en Internet para almacenar los archivos de tu sitio web, lo que lo hace accesible a los visitantes cada vez que deseen verlo.